BOLÍVAR

BOCANADAS DE LIBERTAD

Resultaría ocioso preocuparse por perder una apuesta respecto a qué inspiró al comerciante español José F. Rocha a dar el glorioso nombre de Bolívar a una marca de Habanos. Obviamente, la firmeza de carácter, valentía y heroicidad del más conocido en el ámbito geográfico y cultural latinoamericano como El Libertador. Y es que José Antonio Simón de la Santísima Trinidad Bolívar y Palacios, Simón Bolívar (1783-1830), ocupa un lugar cimero en cualquier estudio sobre el pensamiento y acción revolucionaria. Es uno de los próceres de más elevada figuración en la gesta emancipadora americana del siglo XIX. Forjador sin igual de la independencia de Venezuela, Colombia, Ecuador, Perú y Bolivia, de él se ha dicho que «prédica y lucha por la independencia, la soberanía, la justicia y la integración latinoamericana son inseparables».

Aparecida en 1902, esta prestigiosa denominación fue promovida por la Compañía José Rocha y producida en la fábrica de El Crepúsculo. Ya instalado en La Habana, lanza en 1927 dicha marca, de importante demanda en el Reino Unido, y posteriormente comprada por la firma Menéndez, García y Cía. Después de fallecido Rocha, la entidad y derechos de marca fueron adquiridos por Cifuentes y Cía., trasladándose su producción a la renombrada fábrica de Partagás.

Coincidentemente, tanto la marca global Partagás como la multilocal Bolívar, con

más de una decena de ediciones regionales –en Alemania, Francia, Benelux, Portugal, Brasil, Canadá, Reino Unido, China, Rusia, Suiza, Bulgaria, Andorra, España, entre otros–, además de gran importancia para la exportación, ostentan una indiscutible fama de Habanos de fortaleza fuerte, de carácter y plenos de gusto, razón por la cual la confección de unas y otras labores exige de maestría y experticia por parte de los torcedores al realizar correspondientes ligadas de hojas, vía por excelencia para respetar calidades y autenticidades.

Y a propósito de sensaciones y fortalezas, viene a colación el pasaje (¿premonitorio?) de una relevante obra de la narrativa garciamarquiana, que describe cómo Manuela Sáenz, sempiterna compañera de Simón Bolívar, lo ayuda a escapar y enfrenta a los asaltantes desleales que irrumpieron en un inacabado momento de amor, ripostando con valiente sagacidad a acosadores interrogatorios: «Mientras ganaba tiempo con la parsimonia de las respuestas, fumaba con grandes humos un tabaco de carretero de los más ordinarios, para cubrir el rastro fresco de agua de colonia del Libertador que aún permanecía en el cuarto».

Al igual que sucede con tantos nombres de vitolas con que son bautizados los Habanos, los de esta sublime marca son también sugerentes, emblemáticos, viriles y deslidades. criptores de potencial En sus vitolas, enaltecidas por vistos as y elegantes habilintensos taciones, resaltan los i rasgos caracterológicos del rostro bolivariano, en tanto recuerdan la época dorada de la litografía tabacalera: Belicosos, Campeón, Colosales, Coronas Extras, Coronas Gigantes, Distinpeciales guidos, Emperador, Especial No. 1 y No. 2, Fabulosos, Medalla de Oro, Gran Belicoso, Inmensas, Libertadores, Regentes, Simones.

La totalidad de las producciones de esta selecta y prestigiosa nomenclatura marnadas caria son confeccion “Totalmente a Mano con Tripa Larga”, usando hojas esajo*, cogidas de Vuelta Abregión ubicada en la occidental provincia de Pinar del Río, considerada con acierto como la mejor

zona tabacalera de esta Isla Grande. En suma, cosas de gran valía para los más experimentados fumadores del mundo.

Distinguen en su vitolario la edición limitada Bolívar Soberano (54 x 140 mm de largo), que por primera vez presentó la vitola de galera Duke, totalmente inédita en el portafolio de la marca, así como el Bolívar Regentes (52 x 130 mm de largo) Edición limitada 2021 y el Bolívar New Gold Medal, que se encuentra entre los Habanos más famosos de colección y es uno de los mejores de sabor completo, fuerte y con mucho cuerpo, matices que lo convierten en un Habano de culto. Habanos, S.A. presentó con Bolívar New Gold Medal una de las vitolas más apreciadas por los aficionados, como especialidad para la red internacional bajo franquicia La Casa del Habano.

EN LAS VITOLAS DE LA MARCA BOLIVAR, ENALTECIDAS POR VISTOSAS Y ELEGANTES HABILITACIONES, RESALTAN LOS INTENSOS RASGOS CARACTEROLÓGICOS DEL ROSTRO BOLIVARIANO, EN TANTO RECUERDAN LA ÉPOCA DORADA DE LA LITOGRAFÍA TABACALERA